La capilla de San Julián se trata un edificio religioso, construido en 1930 sobre uno anterior según reza en la inscripción de la parte superior y que se localiza en la Cuesta de las Carnicerías, una de las entradas al Barrio de La Villa de Requena.
Actualmente se desarrolla en una planta, pero existe documentación gráfica que muestra que la capilla original poseía un piso superior que se derrumbó y que fue el motivo de la construcción de la capilla actual del siglo XX. La capilla que tiene una superficie útil de 18,20m2 y una superficie construida de 24,30m2, se adosa a las fachadas posteriores de dos edificios, de uso residencial, que tienen su acceso por la Calle Fortaleza.
ESTADO INICIAL
Debido a filtraciones de agua, el falso techo que conformaba la cúpula interior de escayola se derrumbó parcialmente. Además, el edificio presenta graves problemas de humedad, que se hacen evidentes por los desconchados tanto en el interior como en el exterior de la capilla, desprendimiento de varios tabiques que actúan de cámara de aire y como elemento separados de las paredes medianeras, desprendimiento de parte del alicatado y falso techo del cuartillo. Por otro lado, el altar se encuentra muy deteriorado y el pavimento presenta humedades que llegan del terreno.
PROCESO DE RESTAURACIÓN
Debido al mal estado en el que se encuentra el edificio, desde finales del año 2023 se está llevando a cabo, entre otras, las siguientes actuaciones:
- Picado, desescombrado y reciclado de escombro de los elementos interiores de la capilla derrumbados y deteriorados. También del enfoscado base de la fachada, eliminándolo totalmente, sin deteriorar la superficie soporte que quedará al descubierto para su posterior revestimiento.
- Revocado de mortero de cal sobre paramento exterior de fachada.
- Formación de bóvedas y cúpula, realizadas con fábrica de ladrillo de 4cm, recibido con mortero de cemento, usando como molde un entablado de madera.
- Reparación de cámaras de aire en paredes interiores afectadas, sin actuar en paredes medianeras ni muralla, con ladrillo cerámico del nº4, para solucionar el problema de humedades.
- Revoco liso con acabado lavado realizado con mortero de cal sobre paramentos interiores.
- Sustitución de rejillas de ventilación de cámaras de aire por unas nuevas.
- Debido al mal estado en que se encuentra el pavimiento se ha decidido la sustitución de las baldosas de mármol por otro pavimento más tradicional como son las baldosas de barro cocido que permite la transpiración. En esta actuación no se ve afectado el subsuelo de la capilla.
- Recuperación de parte de la azulejería del s.XX que es colocada como zócalo en todo el perímetro interior de la capilla.
- Pintura al silicato para exteriores e interiores. Este tipo de pintura permite la traspiración de la humedad, por lo que impide el desprendimiento de la misma.
- Colocación de azulejería en la contrahuella de los escalones del altar con baldosas de barro manual decoradas a imitación del “mocadoret” valenciano.